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Carta del consejero delegado de Starbucks: dejemos claro lo que nos define

«Somos una sociedad con una misión y con promesas arraigadas en la humanidad y la generosidad. Aborrecemos el odio. Rechazamos enérgicamente la violencia contra los inocentes. Gracias a nuestros valores, nuestro buen desempeño económico pasa siempre por el tamiz de la humanidad. Nos definen la valentía, el sentido de pertenencia y la alegría: conseguimos resultados por medio del buen hacer. Y nos marcamos objetivos ambiciosos de cara a nuestros partners y partes interesadas, y lo hacemos con plena conciencia, transparencia y rendición de cuentas.» Laxman Narasimhan, consejero delegado de Starbucks. 

 

Partners, clientes y partes interesadas de Starbucks: 

Como empresa, Starbucks ha hundido siempre sus raíces en lo humano. La COVID-19 fue para nosotros, como para muchas otras empresas, todo un desafío. El mundo se transformaba, y nosotros no conseguíamos cambiar al mismo ritmo; pero aprendimos de la experiencia, y reorientamos nuestros pasos. 

Gracias a todo lo aprendido, empezamos a invertir intensamente en nuestros partners y establecimientos, además de diseñar una estrategia dirigida a reinventarnos. Sobre la base de los éxitos cosechados durante todo un año de transformaciones, ampliamos nuestra estrategia a futuro y además, redoblamos la apuesta por las personas

Esta estrategia de futuro tiene como requisito ineludible inyectar energía en nuestra cultura de la asociación empresarial —de la que me ocuparé yo mismo, a título personal, acompañado del consejo de administración— y será supervisada por la nueva Comisión de Impacto sobre el Medio Ambiente, los partners y la Comunidad que va a constituirse. 

Este mismo año, en fecha anterior a la presente, lanzamos la Misión y las Promesas, que rinden homenaje a nuestro pasado mientras ensalzan la evolución a futuro de la empresa. 

Nuestra Misión otorga capacidad de acción a los partners, y es que toda acción conduce a un propósito de orden superior: con cada taza, con cada conversación, con cada comunidad, estamos dando aliento a las infinitas oportunidades de conectar como seres humanos. 

Nuestras Promesas proporcionan un marco para la empresa, en todo su potencial, ante las diferentes partes interesadas. Adquieren vida en nuestras acciones y en las de cientos de miles de partners en todo el mundo. A los partners, les prometemos tender un puente que lleve a un futuro mejor. A los clientes, elevar su día a día. A los agricultores, garantizar el futuro del café para todos. A las comunidades, realizar una aportación positiva. Al medio ambiente, dar, en la medida de nuestras posibilidades, más de lo que recibimos. 

Las acciones que subyacen a estas Promesas demuestran que la generosidad se encuentra en el mismo centro de lo que somos. Nos hemos esforzado siempre por ser una empresa diferente. Pero no podemos dejar de reconocer que llevamos a cabo nuestra actividad en un mundo que también cambia.

Los relatos se ven conformados por voces externas sin conexión alguna con la marca, y luego son amplificados por otros. Como empresa orientada a la generosidad, lo que nos representa es la humanidad. Lo que nos define es la conexión entre seres humanos. Aborrecemos con todas nuestras fuerzas el odio, la violencia y los ataques perpetrados contra inocentes. Con independencia de dónde y cuándo se produzcan. 

En estos tiempos cambiantes y tendentes a la polarización, hemos presentado los Valores que subyacen a todo lo que significamos. Gracias a nuestros Valores, nuestro buen desempeño económico pasa siempre por el tamiz de la humanidad. 

Valoramos el buen hacer. Valoramos los resultados que conseguimos cuando aportamos concentración, integridad e ímpetu a nuestras mayores ambiciones. Valoramos la valentía. Valoramos el sentido de pertenencia. Y valoramos la alegría

Hace ya ocho meses que tengo el privilegio de dirigir esta sociedad. Llegué a este país, como inmigrante, en 1991. Sé muy bien lo que significa contar con un puente que permita alcanzar un futuro mejor. Y vine a Starbucks por el increíble historial que posee la empresa en la construcción de ese puente que permite a nuestros partners conquistar un futuro mejor. Mientras trabajaba en diferentes establecimientos y escuchaba las historias de muchos de los partners, aprendí que podemos hacer aún más, todos juntos. 

Ha llegado el momento de mirar al futuro sin miedos ni limitaciones y trabajar, codo con codo, para conquistarlo. La necesidad de humanidad y de conexión entre personas no podría ser más acuciante. Cuando miro por los ventanales de nuestros establecimientos, repartidos por todas las partes del mundo en las que estamos presentes, no me cabe duda de que esa necesidad está ahí. Y estoy seguro de que, de manera colectiva, podemos encontrar la forma de acceder a las infinitas posibilidades que se abren cuando los seres humanos conectan entre sí. 

Con todos los respetos, 

Laxman 
consejero delegado, Starbucks Coffee Company